martes, 2 de septiembre de 2014

Así no más

Hoy he vomitado, literalmente.
Ya el consumir comida poco saludable me pasó la cuenta con una indigestión cuática. En un momento pensé que probablemente llegaría al hospital, pero estoy aquí, escribiendo.
Y es que quisiera vivir una vida normal, siempre lo he querido, y siempre sucede algo que lo impide. Aunque en realidad sé que así es la vida, siempre trae situaciones borrascosas, mas unidas a la belleza del día. Cuando desperté, en una esquina, la de Collao con Tehualda, me di cuenta que el día estaba más claro, brillante, que todas las casas y los edificios me parecían hermosos, que las calles y hasta los automóviles tenían una luz diferente, estaban ahí, completos, siempre estuvieron ahí completos, solo que mis ojos tenían cataratas imaginarias, que no me permitían ver esto.
 Una vez que acepté esa luz, fui feliz, muy feliz, me sentí tan viva tanto que supe que había resucitado.
Sin embargo, ese destello provocó un colapso que se venía gestando desde hace muchos días, muchos. Después de ir al baño, observaba mis desechos, que no estaban digeridos, sino que habían pasado de largo jajaja, pedazos de maíz y otras cositas flotantes.
Es por eso que pienso que últimamente he dejado pasar tantas cosas, tantos momentos, tantos sentimientos y añoranzas, las he dejado pasar sin que mi mente pudiera digerirlas, he estado tan ciega, encerrada en los lamentos del pasado, reviviendo una y otra vez los momentos tormentosos de la vida. Y hoy, hoy están, todavía, devolviéndose, por mi boca y por mis intestinos, porque hay cosas que no hay que intentar consumir, porque no ayudan?. Y que, sin embargo, te sacuden para recordarte que estás viva c:
FIN <3 p="">

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